La editorial presente muestra, más que notificar, dar una visión general de la situación dad en el hermano país Ecuador.
Como es de público conocimiento, el intento de golpe de estado al presidente elejido por el voto popular Rafael Correa fué aplacado y controlado por las fuerzas especiales encargadas de la seguridad presidencial. Esa fué la noticia, pese a que los dos diarios de mayor tirada de Argentina lo caratulen como ¨rebelión¨.
Ahora bien, mirando desde fuera de la noticia, podemos hacer un recuento historico regional y empezar a trazar lineas que nos den una visión distinta o mejor.
En el año 2002, el presidente constitucional Hugo Chavez sufrió, con sus variables locales, un intento de golpe de estado. En esa ocasión, FEDECAMARAS fué quien confronto al gobierno bolivariano en descontento con sus póliticas.
En Junio del 2009, Manuel Zelaya fué desplazado por los altos mandos del ejercito (Apoyados por el poder judicial) luego de instar a una votacion para una asamblea constituyente, La Corte Suprema de Justicia y el Tribunal Superior Electoral calificaron la consulta como ilegal, con base en una ley aprobada posteriormente a la realización de la convocatoria (cinco días antes de la celebración de la consulta) expresamente para prohibirla.
Tras el golpe, Roberto Micheletti se hizo cargo de la presidencia hasta que en Noviembre de ese año se llamo a elecciones, las cuales fueron ganadas por Porfirio Lobo, del conservador Partido Nacional de HOnduras.
Si bien cada país tiene sus particularidades y su historia, podemos ver a traves de ello que todos tienen cosas en comun, ergo, tienen desenlaces parecidos, con mejor o peor fortuna.
El origen de una actitud destituyente está en un sector que, por su inserción en el sistema, acumula una fuerza determinada y dispara un conflicto violento que toma de rehén a la sociedad y que no busca la resolución de las reivindicaciones que lo impulsan sino debilitar al Gobierno para sustituirlo por otro. Entiende que sus verdaderas necesidades sólo serán satisfechas con otro gobierno, pero no lo reconoce.
Los policías ecuatorianos vieron que con la nueva ley, que suprimía algunos de sus privilegios, el proyecto de país de Correa los cambiaba de lugar. Y es un lugar que consiguieron tras años de gobiernos que trataron de congraciarse con las Fuerzas Armadas y de seguridad, en un país con tradición golpista.
Latinoamérica conoce perfectamente, y desde este humilde espacio ya lo hemos figurado, lo que fueron los golpes de estado dados en la región con el apoyo de Estados Unidos hace más de 3 décadas.
Casualmente, la madrugada previa al golpe en Ecuador se posteó un informe del Plan CONINTES. Lo que nos hace creer y pensar que necesitamos recordar y analizar al máximo este tipo de resoluciones ranciamente autoritarias y anti populares.
Rodrigo Cabrera - Junta Permanente
gracias ,estamos tan sencibles , por todo lo ocurrido , k esto es un balsamo de esperanza y fe . graias AMERICA POR LA UNION .
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