Imagen: John Willian Cooke y Juan Perón en Republica Dominicana, en el verano de 1958.
Podemos analizar lo que vimos hasta aquí sobre el pensamiento de Cooke en tres etapas:
La primera de ellas de pensamiento liberal Irigoyenista de su juventud.
La Segunda desde sus trabajos como diputado y como lider de la resistencia una vez caido el peronismo. En esta etapa ya nacionalista experimenta un proceso de radicalización permanente.
Y su tercera etapa que se verá en esta entrega, con el triunfo de la revolución cubana abraza el marxismo como herramienta de analisis.
Una huelga iniciada en los frigoríficos de mataderos en Enero de 1959 fogoneda por Cooke y dirigentes peronistas pone de Cabeza el barrio de la capital y termina en una brual represión y obreros despedidos y encarcelados. Esta "extralimitación" en el accionar pone de manifiesto las contradicciones que existían entre Cooke y Perón. El consejo del PJ anuncia que estas acciones fueron "alianzas de un sector del peronismo con el comunismo y no representa la voluntad del general".
Cooke la manda una carta a Peron, la que nunca es contestada. Ya muy aislado dentro del peronismo, disuelve la publicación de su revista Soluciones y emprende un viaje a Cuba que cambiara su vida.
En cuba entabla una fuerte amistad con Fidel Castro y el Che Guevara. Se propuso una tarea titanica, pretendió explicarle peronismo a los barbudos comunistas y hacer que el peronismo entienda la dialéctica de la revolción cubana, y debían ver que el futuro estaba marcado por esos jóvenes rebeldes.
En la ultima etapa de su vida, terminó defendiendo al peronismo desde una postura clasista. Creía que las propias contradicciones del movimiento nacional lo llevarían a su propia destrucción. Arriesgaba al peronismo como "un gigante invertebrado y miope". "El peronismo -para Cooke- no desaparecería por sustitución sino mediante superación dialéctica, es decir, no negandoló sino integrándolo en una síntesis". Por ellos sus esfuerzos estuvieron siempre puestos en integrar a todas las demás fuerzas a un frente de liberación nacional, "porque con el peronismo solo no se puede hacer la revolución".
Perón en una carta fechada en Febrero de 1965, le contesta lo que podía esperarse, tras las diversas acusaciones esgrimidas por Cooke contra los dirigentes de "Burócratas", el general responde desde el exilio "porque se encarga tanto en desprestigiar sistemáticamente a dirigentes que, bien o mal, tienen la dirección del movimiento y que han sido electos como por las bases". Perón respalda a la diligencia, no quedara mucho mas por caminar.
En los primeros meses del 1968 un cáncer de pulmón lo obliga a regresar de Montevideo a Buenos Aires, donde se interna en el Hospital de Clinicas. Los cinco atados de cigarrillos que fumaba, que solian terminar mas en su cuerpo que en el cenicero, terminaron por consumirlo a el.
Finalmente el 19 de Septiembre muere de un ataque cardíaco.
Hasta su testamento es una muestra de su militancia permanente, desea "donar todos los órganos, piel, ojos, y todo lo que fuere de uso posible... Ya que no he podido, por medio de una muerte heroica contribuir a la solución revolucionaria de nuestro drama Americano... Ademas de esta forma podre ahorrar el trabajo de que se hace con mi cuerpo, prefiero vivir en la memoria de los que me han querido por un tiempo y en aquellos que luchan por la causa de la libertad americana." y ademas, prohíbe expresamente que se le de cualquier tipo de bendición religiosa.
Queridos amigos, después de conocer la vida de este compañero, me propongo una valorización personal.
El valor de Jonh William Cooke y su influencia es principalmente ideológica. Cooke tendió a sintetizar dos idearios irreconciliables: el nacionalismo y el socialismo. Cooke fue el padre de la izquierda peronista, pero también fue el creador de la formula socialismo nacional, que domino la escena del pensamiento de las décadas del '60 y '70.
Como es de esperar después de tanto palabrerio, pido perdón por la extención, pero no creo que pueda hacerse de otra forma.
Su pensamiento en las próximas dos entregas.
un saludo,
elmellinico
to be continue...
Es necesario inventar una onomatopeya para el aplauso, no solo para el post, sino a las claras para Cook.
ResponderBorrarLa revolucion la lleva en la mente.
Bernardo Villaverde El 11 de agosto a las 17:30
ResponderBorrarGraciasss el Bebe era un militante con muchas agallas , hoy necesitamos leer más Coocke , Jauretche , Scalabrini Ortiz , Ramos , y tantos otros para seguir profubdizando el MODELO...
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Sandra Polak El 08 de agosto a las 13:07
Gracias, compañeros, una vez más, por el excelente material propuesto en cada uno de sus mensajes. Un gran abrazo, militante, por supuesto.
Al Gordo le sobraban pelotas... La síntesis de la perfección en la lectura, comprensión y táctica revolucionaria.
ResponderBorrarLa mención del Bebe y la huelga del frigorífico es una de las tantas fantasías que se tejieron desde la izquierda sobre la figura del gordo para darle una envergadura que en esa época ya no tenía ni volvería a tener. Cooke trató de participar en la toma del Lisandro de la Torre y alguno de sus propios amigos le aconsejaron que se marchara, la gente luego del fracaso del voto a Frondizi que él había propiciado ya no quería saber nada con él. Marcharse a Cuba fue una de las pocas opciones que le restaban. Hasta el viejo César Marcos que lo habia formado no deseaba saber nada del gordo, menos aún los de la Juventud que le echábamos la culpa del fracaso de una política. Repito entonces por si no quedó claro, el gordo en el 60 se va por derecha si apelamos a estos trajinados sentidos posicionales, y luego en el 63 o 64 vuelve por izquierda... quiero decir, representando a los cubanos y proponiendo organizar un partido marxista leninista. Era casi un exabrupto, en especial porque nosotros organizábamos el MRP/FAP para respaldar el anunciado regreso de Perón. Justo en esa época el gordo lanza el desatino del gigante invertebrado y miope... no podía soportar que en el Peronismo nadie le diera bola y que su grupo ARP fuese un rejunte de bienintencionados que desde la izquierda y el cristianismo pujasen por entrar al Movimiento, pensando con candidez que esa era la puerta de entrada... Jorge Eduardo Rulli
ResponderBorrarEstamido Jorge, con todo el respeto que podemos tenerle los jóvenes déjenos discrepar al respecto... Grandes íconos de esa época (me viene a la mente Duhalde o O. Peña) reivindican la actitud del gordo y lo ponen como un ideólogo de la toma del Lisandro de la Torre... PEro más allá de eso, consideramos injusta su alusión a "que él había propiciado" el voto a frondici, cuando fue el propio perón (quién lo designó como delegado personal en el país) quién le dio la directiva de firmar dicho acuerdo... Asimismo, y como si no fuera suficiente, el propio Cooke escribe en el 64 una lectura fenomenal de la crisis del sistema político de las FFAA, en la que da por tierra el voto a cualquier partido... Por otro lado, y ya poniéndonos puntillosos; el acurdo firmado con Frigerio era completamente beneficioso para los sectores populares, retraía la situación política-económica de los trabajadores a comienzos del 55, hacía retroceder al neo-peronismo y dejaba todo listo para la vuelta del general... El problema no fue la rúbrica, sino su incumplimiento sistemático por parte del radicalismo...
ResponderBorrarCreo que huelga decir que lo escrito por él es de una altura que, caiga mal o bien, todavía no se ha alcanzado... En Peronismo y Revolución (68) predice la triple A y el golpe genocida, desnuda de manera impecable los mecanismos burocráticos, las estrategias de las FFAA y el papel de cada actor en el sistema político... Está a años de distancia del resto de las lecturas coyunturales... Eso, guste o no, es irreprochable... Y lo del "gigante miope e invertebrado" creo q es más que atinado, pese a que pueda herir la susceptibilidad de algunos; más en la lectura que él hace del peronismo y las necesidades históricas que el mismo debía afrontar...
Le dejo un saludo combativo y le reitero el respeto que le tenemos los jóvenes a usted y toda su generación de luchadores!!!
Abrazo compañero!
Leandro.