La Revolucion de Mayo (II)

El día 13 de Enero la Junta de Sevilla (último bastión del poder español) se disuelve y en lugar de ella, se forma un consejo de Regencia fantasmagórico.

El desembarco de una fragata inglesa en el puerto de Montevideo, trae las noticias de la metrópoli enloqueciendo al virrey, quien intentó incautar todos los periódicos para que la noticia no se propague, pero para el 18 de Mayo, Belgrano y Castelli, enterados de los hechos, se encargaron de difundir la noticia.

El 18 de Mayo en la casa de Rodríguez Peña, Juan José Castelli y Martín Rodríguez, fueron designados por el grupo para hablar con Cisneros y solicitar un cabildo abierto.

La fecha era el 22, pero el mismo 21, se hicieron presentes 600 hombres al mando de Domingo French y Antonio Luis Beruti en La Plaza, agrupados bajo el nombre de Legión Infernal, que desconfiaban de la palabra de Cisneros pedían a gritos que se celebre el Cabildo Abierto. El síndico Leiva salió al balcón y anunció formalmente el Cabildo Abierto, para el día siguiente. Luego de que los ánimos no cesaran de caldearse, intervino el jefe del regimiento Patricios, Cornelio Saavedra, garantizándoles el apoyo militar a sus reclamos.

El día 22 de Mayo, congregados en el cabildo, Castelli y Saavedra coincidían en que Cisneros debía renunciar, pero no lograban determinar cómo erigir el próximo gobierno. Castelli, por su parte, creía que la formación de la Junta tenía que tomarla el pueblo, a través del voto. Pero Saavedra quería que el cabildo sea el responsable de esa tarea.

Esto  es clave en el futuro inmediato de los acontecimientos, ya que da rumbo a lo que luego decanto en los sucesivos gobiernos.

Tanto el día 22, como el 23, se encuadraron en horas de presión y mucha discusión entre los representantes del pueblo y la oligarquía criolla. El sindico Leiva y miembros adictos al virrey, intentan que Cisneros forme parte del Cabildo. Belgrano, hombre moderado en sus expresiones, llegó a exigir bajo la cruz de su espada que de no renunciar el Virrey a las tres de la tarde, él mismo lo derribaría.

Finalmente, la noche del 24 de Mayo, Castelli y Saavedra, con una fuerte delegación que los escoltaban, logran la disolución de la junta y deponen a Cisneros.

Para la mañana del 25 de Mayo, la dupla French y Beruti junto a los infernales y grupos de vecinos que apoyaban los reclamos, se apostaban por toda la Plaza de la Victoria, rodeando el Cabildo. Cuando todo parecía demorarse, Beruti amenazó con hacer entrar a toda la muchachada si no se elegía de inmediato los integrantes de la Primera Junta.

Así, se conformó la misma:

Presidente:  Cornelio Saavedra.

Secretarios: Mariano Moreno – Juan José Paso

Vocales:  Manuel Belgrano – Juan José Castelli – Miguel de Azcúenaga – Manuel Alberti – Juan Larrea –Domingo Matheu

Pero todo no era color de rosas. La Audiencia, algo así como la corte suprema de justicia, no reconocía a la Junta como gobierno. Cisneros y Liniers comienzan un complot que rápidamente es sofocado por Moreno, quien envía a Francisco Ortiz de Ocampo. Éste se niega a fusilar a Liniers por haber combatido con él en las invasiones inglesas, por lo que Castelli asume la tarea, ajusticiando a Santiago de Liniers y sus cómplices el 26 de Agosto de 1810.

De esta manera, los episodios de la Revolución de Mayo sedimentan la estructura independentista de un continente americano en hervor.

Personajes como San Martín, continuarían la lucha por la independencia hasta llegar a 1816.

RODRIGO CABRERA - JUNTA PERMANENTE